Quince años esperando...

Quince años esperando este momento. Quince años anhelando, suspirando, con el momento hoy vivido, soñando con tus ojos y tu sonrisa. En estos últimos días antes del reencuentro, he estado preguntándome cómo y cuánto habrías cambiado. ¿Seguirías teniendo esa sonrisa picarona que me robaba el alma? ¿Y esos ojazos azules que te enamoran sin quererlo? Y tus chanzas, divertidas, asombradas a veces, recordadas en tantas ocasiones... ¿Se habrá encanecido mucho tu pelo? ¿Y las arrugas de tu rostro, serán profundas y marcadas, o leves e insignificantes?

Y tu llegada no podía ser normal, no. Tu, por supuesto, tenias que llegar a lo grande, metido en el maletero de un coche, rodeado del ejercito, corriendo riesgo para, acto seguido, agarrar tu latigo y emprenderla a puñetazos con los malos...

Vengo de ver "Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal" y huelga decir que me ha EN-CAN-TA-DO. Tiene todo lo que ha de tener una pelicula de Indi: accion, humor, buen guion, fantasia, giños cinematograficos, buenos actores y actrices, efectos espectaculares al servicio de la historia -tal y como deberian ser siempre los efectos especiales, y no al reves-, una mala muy malosa -aunque esta vez los nazis de Hitler han sido sustituidos por los rusos de Stalin- y muchas mas ingredientes que otras peliculas han intentado imitar -La momia, por ejemplo-, pero que se han quedado con las ganas -sin querer faltarle al respeto a nadie-. Indiana Jones ha vuelto, y con el los latidos desbocados de mi maltrecho corazon...



¡Incluso sale una Harley Davidson! ¡Que mas puedo pedir!